Miguel Alemán V.
Image

Nació en Veracruz el 18 de marzo de 1932. Egresado de la UNAM, es licenciado en Derecho. Fue Coordinador General de Noticieros de Telesistema Mexicano S.A.; Director Fundador de la Dirección de Noticieros de Telesistema Mexicano S.A.; primer Vicepresidente de la Cámara Nacional de la Industria de Radiodifusión; miembro del Consejo Consultivo Internacional de Americas's Society; consejero de Panamerican Development Foundation; fundador de la primera sucursal en Veracruz del Banco de la Mujer, denominada Asociación de Mujeres Empresarias, A.C. (ADEM); Vicepresidente y Subdirector General de Novedades Editores, S.A. de C.V.; y miembro del Consejo Directivo de la Fundación Cultural Televisa. Es también conocido por su trayectoria periodística en las revistas Siempre y Visión Latinoamericana. Hasta el día 1 de mayo de 2000 fue Vicepresidente y Presidente Ejecutivo de Televisa, S. A. de C. V. Fue miembro del Consejo Consultivo de UNICEF en México, del Consejo Consultivo Latinoamericano de Coca-Cola Internacional; del Consejo de Administración de Aeroméxico; y de la H. Junta de Gobierno del Colegio de la Frontera Norte. Ex-gobernador de Veracruz (1998-2004).

Muestra

Los guerreros destruyen y los líderes construyen

Martes, 24 de junio de 2025 21:17 Miguel Alemán V.

(MATERIAL EXCLUSIVO PARA MEDIOS IMPRESOS. QUEDA PROHIBIDA SU PUBLICACIÓN EN INTERNET)

Según Winston Churchill, la victoria más importante de una guerra es ganar la paz. La Europa del esplendor intelectual y ejemplo de potencia económica de la revolución industrial de occidente estaba devastada al término de la Segunda Guerra Mundial. La guerra destruyó caminos, vías férreas, puertos, plantas industriales, zonas urbanas y ciudades enteras, pero lo más importante fue la pérdida de vidas, que dividieron a una sociedad deprimida y herida física y moralmente.
La capacidad de recuperación de la sociedad europea dependía de una transformación donde los liderazgos de guerra aceptaran reorientar sus esfuerzos para ser constructores de paz.
La síntesis de este proyecto fue el conocido Plan Marshall, mediante el cual a gran velocidad y con una inversión sin precedente se reconstruyeron ciudades enteras; las fábricas de guerra regresaron a sus productos industriales, las finanzas y el comercio retomaron el papel fundamental de motores de la economía. Reconstruir las ciudades y las industrias era tan importante como reconstruir la autoestima y la unidad de la sociedad.
Aquella Europa dividida tenía los líderes que, desde el primer día de paz, veían una región unida, integrada y cooperativa en forma recíproca. Gradualmente se superaron las barreras come...